Don Enrique Ramirez
El 30 de enero de 1913 nace Enrique Ramírez Irizarry. En su la pubertad, inició su participación como atleta en los deportes siguientes:
a. Boxeador aficionado en patios y plaza pública en los tiempos en que Jack Dempsey era inspiración de todo amante del arte de achatar narices; consecuencia: nariz fracturada desde hace más de 40 años.
b. Jugador y dirigente del equipo de béisbol ABC, donde militaban Hiram Cabassa, Guillermo Lluch, June Ramírez y otros. Fue miembro del equipo Junior de la YMCA de San Juan en 1931 y de otros equipos de Lajas hasta el 1935.
3. Dirigente y jugador activo del equipo de béisbol Estrellas de Ramírez por varios años en Lajas. Recordamos los campeonatos de aquel entonces contra los equipos de Gilberto Ramírez, La Plata, etc., equipos que comparaban favorablemente con la Clase "A" de hoy día.
En el año 1935, comienza una nueva etapa como mentor de la juventud en campo de los deportes, la era de oro del boxeo y otros deportes en Lajas, hasta el 1940. ¿Qué papel desempeñó durante esos quince (15) años?
1- Descubrió una serie de prometedores jóvenes boxeadores, entre ellos a José (Purro) Basora a quien guió desde que era un chamaquito de quince años. Fue su mentor, consejero y segundo padre durante años que brilló en el boxeo aficionado boricua con 72 peleas y solo dos derrotas las cuales vengó antes de hacerse profesional. Supervisaba el entrenamiento, pagaba parte de su alimentación por el estado económico que le asistía y, para colmo, se levantaba en las horas de la madrugada para correr con él y observarlo en su entrenamiento.
Hizo de Purro, el primer campeón Centro Americano y del Caribe en el peso ligero. Al interesarse los grandes magnates del boxeo profesional, puso a su pupilo en manos de Sixto Escobar sin exigir un solo centavo por su Contrato. De lo mucho que hizo Basora es historia que casi todos conocen en y fuera de Lajas. Cuando éste celebró peleas en Puerto Rico, Enriquito estuvo en su esquina en todas sus peleas, con autorización expresa de la Comisión de Boxeo de Puerto Rico. Me refiero a cuando ya Basora era profesional consagrado. En esa época brillaron otros dos boxeadores: Ramón Aponte y el gran Domingo Padilla.
2- En esta etapa se dedicó a preparar atletas de Pista y Campo, cuando Lajas fue llamada la Finlandia Boricua, con su cuarteto de campeones: Aponte, Padilla, Basora y Lolí.
En el tiempo en que para obtener un trofeo había que ganarlo tres años consecutivos, Ramón Aponte (el Indio) como lo conocían todos, obtuvo el primero. Cuando había que competir y estar tres días en San Juan (durmiendo en camas de 25 centavos en la YMCA) ya que presupuesto no alcanzaba para más. Guayama, Humacao y Caguas, sitios de competencia donde Lajas siempre respondía presente. Liche, Percha y Amílcar son testigos fieles de cómo se vivió el deporte en ese entonces.
3- Enrique fue apoderado y dirigente de equipos de baloncesto por más de 15 años. Cuando había que derrotar a San Germán para ir a series finales a San Juan y todo se malograba cuando por jugarretas del destino, se perdía antes de llegar a la final (... o por incompetencia de los árbitros) llegaba el momento de vida feliz para Enrique y todo Lajas.
En el 1950, al declararse Campeones de Puerto Rico, el pueblo permaneció despierto hasta las tres de la madrugada para premiarlos cálidamente con un recibimiento de los que se otorga a héroes.
Aquel glorioso quinteto ha dejado recuerdos imborrables en su mente; Jimmy Pagán, Bebo, Teddy, Félix el Colorao, William Rico y Sergio. Todavía recordamos las alabanzas de la Prensa, de Nando Collac, de José Nicolás Palmer cuando con legítimo reconocimiento se expresaba "Lajas es Campeón de Tercera Categoría, pero puede con los entusiasmos inyectados por Enrique, derrotar a los equipos de primera categoría".
Desde el año 1950 en adelante, la vida cívica y deportiva de Enrique, siempre incansable, se describe como sigue: Al nacer el Club de Leones, comparte la responsabilidad de ser uno de sus fundadores. A veces como Presidente, a veces y miembro del Comité Pro Juventud por casi 22 años en beneficio de la juventud.
Presidió el Comité de Recreación y Deportes de las Fiestas Patronales, donde desarrolló a través de los años una labor callada presentando maratones locales y estatales, carreras en bicicleta, juegos de sortijas a caballo, programas de boxeo y lucha libre; los simpáticos maratones infantiles —en la que ha contado en toda su vida deportiva con la desprendida cooperación de buenos deportistas, la Administración Municipal con su alcalde, Enrique Ortiz Ortiz, sin dejar de mencionar también los distintos Comités de las Fiestas Patronales.
Organizó una actividad deportiva para llevar un grupo de atletas de pista y campo y de boxeadores del Distrito Suroeste de Puerto Rico a las Olimpiadas celebradas en New York en 1968, recolectándose cerca de $6,000.00 —el grupo lució a la altura que Puerto Rico se merecía llevándose la mayor parte de los premios.
Representó a Puerto Rico en los Juegos de Chicago en 1959, en calidad de anotador oficial del equipo de béisbol de nuestra Isla, que fueron sub-campeones. Desempeñó igual labor en los Juegos Centroamericanos y del Caribe en Jamaica en el año 1962.
Enriquito se desempeñó como Supervisor de la Administración de Recreo y Deportes Públicos de Puerto Rico por más de10 años, sin remuneración de clase alguna. Fue supervisor de la Liga Central de Béisbol Aficionado, donde participaban Los Piñeros de Lajas, siendo uno de sus dueños. Fue honrado con un pase vitalicio por el Circuito Doble "A" del Béisbol aficionado por su continuada y entusiasta labor con esta liga.
Ha recibido sinceros y emotivos homenajes por su contribución a los diferentes deportes por el Club de Leones de Cabo Rojo, las escuelas públicas y privadas de nuestro pueblo y por el Club Cívico Deportivo de Lajeños Ausentes en New York.
Para dar al César lo que es del César, el Comité de Recreación y Deportes de las Fiestas Patronales en 1975, aprobó que los Maratones a celebrarse de aquí en adelante. El Alcalde Enrique Ortiz sometió el asunto a la Asamblea Municipal —donde un numeroso público llenó a capacidad las facilidades del Salón de Actos de la Casa Consistorial. Informó además que estaba en tramitaciones oficiales para asignarle el nombre de Enrique Ramírez Irizarry al Parque Atlético Urbano de Lajas, como reconocimiento y gratitud por sus grande logros.
Resumen: Me complace grandemente informar el hecho de que Enrique nunca cobró ni un centavo por su contribución al deporte y que aún los viajes que ha hecho a New York, Chicago y Jamaica fueron sufragados por él, siendo el momento propicio para recompensar sus sacrificios, asignándole su nombre al Parque Atlético de Lajas.
Después de considerado lo anteriormente expuesto sobre Enrique, pregunto yo: ¿Es merecedor nuestro campo atlético que lleve su nombre a perpetuidad?
Nota: No se hace mención a su contribución al deporte como atleta (corredor de larga distancia), actuaciones en los maratones de New York, el 450 Aniversario de San Juan y otros pueblos de la Isla.
a. Boxeador aficionado en patios y plaza pública en los tiempos en que Jack Dempsey era inspiración de todo amante del arte de achatar narices; consecuencia: nariz fracturada desde hace más de 40 años.
b. Jugador y dirigente del equipo de béisbol ABC, donde militaban Hiram Cabassa, Guillermo Lluch, June Ramírez y otros. Fue miembro del equipo Junior de la YMCA de San Juan en 1931 y de otros equipos de Lajas hasta el 1935.
3. Dirigente y jugador activo del equipo de béisbol Estrellas de Ramírez por varios años en Lajas. Recordamos los campeonatos de aquel entonces contra los equipos de Gilberto Ramírez, La Plata, etc., equipos que comparaban favorablemente con la Clase "A" de hoy día.
En el año 1935, comienza una nueva etapa como mentor de la juventud en campo de los deportes, la era de oro del boxeo y otros deportes en Lajas, hasta el 1940. ¿Qué papel desempeñó durante esos quince (15) años?
1- Descubrió una serie de prometedores jóvenes boxeadores, entre ellos a José (Purro) Basora a quien guió desde que era un chamaquito de quince años. Fue su mentor, consejero y segundo padre durante años que brilló en el boxeo aficionado boricua con 72 peleas y solo dos derrotas las cuales vengó antes de hacerse profesional. Supervisaba el entrenamiento, pagaba parte de su alimentación por el estado económico que le asistía y, para colmo, se levantaba en las horas de la madrugada para correr con él y observarlo en su entrenamiento.
Hizo de Purro, el primer campeón Centro Americano y del Caribe en el peso ligero. Al interesarse los grandes magnates del boxeo profesional, puso a su pupilo en manos de Sixto Escobar sin exigir un solo centavo por su Contrato. De lo mucho que hizo Basora es historia que casi todos conocen en y fuera de Lajas. Cuando éste celebró peleas en Puerto Rico, Enriquito estuvo en su esquina en todas sus peleas, con autorización expresa de la Comisión de Boxeo de Puerto Rico. Me refiero a cuando ya Basora era profesional consagrado. En esa época brillaron otros dos boxeadores: Ramón Aponte y el gran Domingo Padilla.
2- En esta etapa se dedicó a preparar atletas de Pista y Campo, cuando Lajas fue llamada la Finlandia Boricua, con su cuarteto de campeones: Aponte, Padilla, Basora y Lolí.
En el tiempo en que para obtener un trofeo había que ganarlo tres años consecutivos, Ramón Aponte (el Indio) como lo conocían todos, obtuvo el primero. Cuando había que competir y estar tres días en San Juan (durmiendo en camas de 25 centavos en la YMCA) ya que presupuesto no alcanzaba para más. Guayama, Humacao y Caguas, sitios de competencia donde Lajas siempre respondía presente. Liche, Percha y Amílcar son testigos fieles de cómo se vivió el deporte en ese entonces.
3- Enrique fue apoderado y dirigente de equipos de baloncesto por más de 15 años. Cuando había que derrotar a San Germán para ir a series finales a San Juan y todo se malograba cuando por jugarretas del destino, se perdía antes de llegar a la final (... o por incompetencia de los árbitros) llegaba el momento de vida feliz para Enrique y todo Lajas.
En el 1950, al declararse Campeones de Puerto Rico, el pueblo permaneció despierto hasta las tres de la madrugada para premiarlos cálidamente con un recibimiento de los que se otorga a héroes.
Aquel glorioso quinteto ha dejado recuerdos imborrables en su mente; Jimmy Pagán, Bebo, Teddy, Félix el Colorao, William Rico y Sergio. Todavía recordamos las alabanzas de la Prensa, de Nando Collac, de José Nicolás Palmer cuando con legítimo reconocimiento se expresaba "Lajas es Campeón de Tercera Categoría, pero puede con los entusiasmos inyectados por Enrique, derrotar a los equipos de primera categoría".
Desde el año 1950 en adelante, la vida cívica y deportiva de Enrique, siempre incansable, se describe como sigue: Al nacer el Club de Leones, comparte la responsabilidad de ser uno de sus fundadores. A veces como Presidente, a veces y miembro del Comité Pro Juventud por casi 22 años en beneficio de la juventud.
Presidió el Comité de Recreación y Deportes de las Fiestas Patronales, donde desarrolló a través de los años una labor callada presentando maratones locales y estatales, carreras en bicicleta, juegos de sortijas a caballo, programas de boxeo y lucha libre; los simpáticos maratones infantiles —en la que ha contado en toda su vida deportiva con la desprendida cooperación de buenos deportistas, la Administración Municipal con su alcalde, Enrique Ortiz Ortiz, sin dejar de mencionar también los distintos Comités de las Fiestas Patronales.
Organizó una actividad deportiva para llevar un grupo de atletas de pista y campo y de boxeadores del Distrito Suroeste de Puerto Rico a las Olimpiadas celebradas en New York en 1968, recolectándose cerca de $6,000.00 —el grupo lució a la altura que Puerto Rico se merecía llevándose la mayor parte de los premios.
Representó a Puerto Rico en los Juegos de Chicago en 1959, en calidad de anotador oficial del equipo de béisbol de nuestra Isla, que fueron sub-campeones. Desempeñó igual labor en los Juegos Centroamericanos y del Caribe en Jamaica en el año 1962.
Enriquito se desempeñó como Supervisor de la Administración de Recreo y Deportes Públicos de Puerto Rico por más de10 años, sin remuneración de clase alguna. Fue supervisor de la Liga Central de Béisbol Aficionado, donde participaban Los Piñeros de Lajas, siendo uno de sus dueños. Fue honrado con un pase vitalicio por el Circuito Doble "A" del Béisbol aficionado por su continuada y entusiasta labor con esta liga.
Ha recibido sinceros y emotivos homenajes por su contribución a los diferentes deportes por el Club de Leones de Cabo Rojo, las escuelas públicas y privadas de nuestro pueblo y por el Club Cívico Deportivo de Lajeños Ausentes en New York.
Para dar al César lo que es del César, el Comité de Recreación y Deportes de las Fiestas Patronales en 1975, aprobó que los Maratones a celebrarse de aquí en adelante. El Alcalde Enrique Ortiz sometió el asunto a la Asamblea Municipal —donde un numeroso público llenó a capacidad las facilidades del Salón de Actos de la Casa Consistorial. Informó además que estaba en tramitaciones oficiales para asignarle el nombre de Enrique Ramírez Irizarry al Parque Atlético Urbano de Lajas, como reconocimiento y gratitud por sus grande logros.
Resumen: Me complace grandemente informar el hecho de que Enrique nunca cobró ni un centavo por su contribución al deporte y que aún los viajes que ha hecho a New York, Chicago y Jamaica fueron sufragados por él, siendo el momento propicio para recompensar sus sacrificios, asignándole su nombre al Parque Atlético de Lajas.
Después de considerado lo anteriormente expuesto sobre Enrique, pregunto yo: ¿Es merecedor nuestro campo atlético que lleve su nombre a perpetuidad?
Nota: No se hace mención a su contribución al deporte como atleta (corredor de larga distancia), actuaciones en los maratones de New York, el 450 Aniversario de San Juan y otros pueblos de la Isla.
🗄Archivo de Don César Feliú
Lajas, Puerto Rico
1 de febrero de 1975.
(extracto)
Lajas, Puerto Rico
1 de febrero de 1975.
(extracto)
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