Personajes del Pueblo | Budy
Detrás de la sonrisa de alguien
Que simplemente… vive
Siempre alegre... como dice una canción. Llueva, truene o ventee, ahí usted verá a "Budy", sonreído. Siempre alegre...
Era su nombre completo Moisés Martínez Pérez y es el hijo menor de Don Bartolo Martínez y Amada Pérez, Ministros de la Iglesia Pentecostal, los cuales llegaron a Lajas procedentes de Humacao.
Aquí en Lajas, en la Calle Abajo, al otro extremo de la Isla, los Martínez Pérez procrearon su familia, muchos hijos todos con nombres bíblicos: Juan, Jeremías, Elías, Job, Moisés, Pérsida.
Budy me dijo que no sabe cuántos años tiene aunque se siente joven. Me dice que ponga cualquier edad, que él no pasa de los 50. Le digo que el alcohol envejece a sus consumidores pero Budy me niega rotundamente que sea consumidor de bebidas alcohólicas. Le digo ¡Si Pepe....! y el se ríe como si le hicieran cosquillas.
Nunca se casó aunque asegura que tiene una novia en Ponce, nunca se mete en deudas, no ha estado en una nómina aunque ayudaba a cargar compras en el negocio de Don Pascual Frank que en paz descanse. Sus hermanos murieron dice Budy que por cuenta del trago, pero tiene una hermana y unos sobrinos en Nueva York.
En esta etapa de mi reunión con Budy le hice la pregunta que más me interesaba: Budy ¿Eres feliz con tu vida? Y se lo preguntó, ya que en mi caso, cada vez en los últimos años que entro al negocio El Karacol en La Parguera, lo primero que miro es una tremenda fotografía de "Budy", pelao de la risa, mellao, sin complejo, una risa auténtica, contagiosa, sin pose de clase alguna. Estoy segura que a muchas personas les pasa lo que a mí. ¡QUE CONTENTURA DEMUESTRA ESA CARA! ¡ESE SEÑOR SI QUE SE VE FELIZ! Estoy segura que todo el mundo siente como yo.
Insisto en que Budy que diga si es tan feliz como se ve en la foto del Karacol. Me contestó lo siguiente y cito:" Vivo tranquilo, duermo bien, feliz y contento." Inmediatamente comenzó a cantar una estrofa de una canción que recuerda de unas, elecciones recientes:
"Por eso me siento Alegre y feliz Votando con Miriam, Con Miriam Ortiz."
Entonces vuelve y se ríe a carcajadas y sigue cantando.
A Budy lo conoce todo el mundo en Lajas y parte del exterior por la foto del negocio de La Parguera. Lava y brilla carros y cuando le dan la oportunidad, limpia patios. Entonces es cuando "maneja" y compra mucha Medalla en cuya compra siempre le hacen descuento.
La seguridad, por lo menos como yo la concibo, a Don Budy no le interesa para nada. Se levanta sin plan, le gusta aventurar y se da la vuelta por La Javilla y La Parguera, sin alejarse mucho del pueblo. El mismo se lava su ropa en una casita en la Calle Abajo donde no hay ni luz ni agua. Hace mandados, es honrado, y dice, sonriendo como siempre, que después que uno se porte bien, todo el mundo lo ayuda.
Budy ha sido amigo de muchos alcaldes de Lajas, de Jorge Ortiz, Saro Marti, Celo Ramírez, Salvador Ramírez, Enrique Ortiz, Walter, Ramiro y ahora Turin. Se identifica profundamente con su pueblo de Lajas y procura participar de todas las actividades aunque no de los entierros. Nunca se aleja mucho y me confió que, cuando le llegue su tiempo, quiere estar en la tierra de Lajas y como si no fuera algo tan serio eso de hablar de finales, termina con otra cancioncita: "Que me entierren en Lajas, en Lajas, Puerto Rico, donde más barato se vende en todo el Distrito."
Y termina como siempre, pelao de la risa y camina hacia la Iglesia Católica donde los de más confianza le echan algún dinerito en una lata que siempre lo acompaña.
Era su nombre completo Moisés Martínez Pérez y es el hijo menor de Don Bartolo Martínez y Amada Pérez, Ministros de la Iglesia Pentecostal, los cuales llegaron a Lajas procedentes de Humacao.
Aquí en Lajas, en la Calle Abajo, al otro extremo de la Isla, los Martínez Pérez procrearon su familia, muchos hijos todos con nombres bíblicos: Juan, Jeremías, Elías, Job, Moisés, Pérsida.
Budy me dijo que no sabe cuántos años tiene aunque se siente joven. Me dice que ponga cualquier edad, que él no pasa de los 50. Le digo que el alcohol envejece a sus consumidores pero Budy me niega rotundamente que sea consumidor de bebidas alcohólicas. Le digo ¡Si Pepe....! y el se ríe como si le hicieran cosquillas.
Nunca se casó aunque asegura que tiene una novia en Ponce, nunca se mete en deudas, no ha estado en una nómina aunque ayudaba a cargar compras en el negocio de Don Pascual Frank que en paz descanse. Sus hermanos murieron dice Budy que por cuenta del trago, pero tiene una hermana y unos sobrinos en Nueva York.
En esta etapa de mi reunión con Budy le hice la pregunta que más me interesaba: Budy ¿Eres feliz con tu vida? Y se lo preguntó, ya que en mi caso, cada vez en los últimos años que entro al negocio El Karacol en La Parguera, lo primero que miro es una tremenda fotografía de "Budy", pelao de la risa, mellao, sin complejo, una risa auténtica, contagiosa, sin pose de clase alguna. Estoy segura que a muchas personas les pasa lo que a mí. ¡QUE CONTENTURA DEMUESTRA ESA CARA! ¡ESE SEÑOR SI QUE SE VE FELIZ! Estoy segura que todo el mundo siente como yo.
Insisto en que Budy que diga si es tan feliz como se ve en la foto del Karacol. Me contestó lo siguiente y cito:" Vivo tranquilo, duermo bien, feliz y contento." Inmediatamente comenzó a cantar una estrofa de una canción que recuerda de unas, elecciones recientes:
"Por eso me siento Alegre y feliz Votando con Miriam, Con Miriam Ortiz."
Entonces vuelve y se ríe a carcajadas y sigue cantando.
A Budy lo conoce todo el mundo en Lajas y parte del exterior por la foto del negocio de La Parguera. Lava y brilla carros y cuando le dan la oportunidad, limpia patios. Entonces es cuando "maneja" y compra mucha Medalla en cuya compra siempre le hacen descuento.
La seguridad, por lo menos como yo la concibo, a Don Budy no le interesa para nada. Se levanta sin plan, le gusta aventurar y se da la vuelta por La Javilla y La Parguera, sin alejarse mucho del pueblo. El mismo se lava su ropa en una casita en la Calle Abajo donde no hay ni luz ni agua. Hace mandados, es honrado, y dice, sonriendo como siempre, que después que uno se porte bien, todo el mundo lo ayuda.
Budy ha sido amigo de muchos alcaldes de Lajas, de Jorge Ortiz, Saro Marti, Celo Ramírez, Salvador Ramírez, Enrique Ortiz, Walter, Ramiro y ahora Turin. Se identifica profundamente con su pueblo de Lajas y procura participar de todas las actividades aunque no de los entierros. Nunca se aleja mucho y me confió que, cuando le llegue su tiempo, quiere estar en la tierra de Lajas y como si no fuera algo tan serio eso de hablar de finales, termina con otra cancioncita: "Que me entierren en Lajas, en Lajas, Puerto Rico, donde más barato se vende en todo el Distrito."
Y termina como siempre, pelao de la risa y camina hacia la Iglesia Católica donde los de más confianza le echan algún dinerito en una lata que siempre lo acompaña.
🗞Wilma Bassat
Historias de Personas
Parguera …el periódico Lajeño
Marzo 1999, Página 9
Historias de Personas
Parguera …el periódico Lajeño
Marzo 1999, Página 9
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